Old dogs, new dicks?

New dogs, old dicks. New lovers, old problems. And it's always the same. It will never change. Nos despertamos con el respectivo dolor de cabeza por haber dormido más de la cuenta. Recuerdo cuando desperté ese día, yo tomé mi cámara y comencé a grabarte. Pensé que podía capturar al menos algo de ese momento. Sabía que no serías mío, por eso decidí hacerlo. Y así fue. Mientras dormías, un vídeo de mi mano recorriendo la suavidad de tu rostro. Cálido frágil, efímero. Acaricié tus frías orejas desprotegidas por tu cabello. Las besé para darle temperatura. Apagué la cámara, y casi sabiendo lo que hacía, despertaste. Tenías cosas que hacer, y te fuiste. Por ende yo también me fui. Tomé el colectivo que me llevaba a casa, en ese entonces vivía en Coghlan, qué hermoso. EL 152 en el bajo fue una buena opción. Me sentía sucio, me sentía inmundo. Sentía que alguien había violado mis sentimientos. Me había engañado para llevarme a la jungla de sus sábanas. Llegué a casa.
Esa situación se volvió a repetir, con él mismo. Pero ese otro día vivía más cerca, ya en San Cristóbal (¿Acaso no todos tenemos derecho a caer con la misma piedra? ¿Acaso no todos tenemos derecho a acribillar un poco más nuestro corazón? Al fin y al cabo, es nuestro). Ese día el también tenía que irse quién sabe a donde. Llovía. Como hoy. Pero era temprano, y hacía frío. De San Telmo a San Cristóbal no hay mucho. Me tomé el 126 recuerdo. Para papá me había quedado a dormir en lo de Sabri. Para Sabri me había quedado a dormir en casa como cualquier sábado. La lluvia se sentía violenta sobre mi rostro. Quisiera decir que se mezclaba con mis lágrimas, pero aunque el dolor inunde mi pecho, las lágrimas de este cuerpo nunca logran salir.
¿Cuando dejaremos de cometer los mismos errores? A él, ya no lo veo. Por mi bien. El luto dura mucho por estos lados y es díficil reponerse. Ahora ¿Quién sabe? Estoy más que seguro que voy a caer de nuevo. No es que esté predispuesto a sentirme mal, pero las cosas no funcionan. Desafortunadamente no creo en los principes azules, ni colorados, ni negros.
"Me caso con vos" me dijo uno anoche.
"¿Vos me conocés?" Casi le respondo, pero decidí dejar mi negatividad para estas horas del domingo.
"Tenés una mirada impresionante, la primera vez que te ví me pasó lo mismo, me hiciste tambalear" me escribió otro. Quisiera decir tantas cosas.
Pero sé que si las digo, será el comienzo de cosas lindas, y así como las cosas suben, sé que bajan drásticamente. Y no quiero, no quiero, NO QUIERO.. 
¿Ilia? No sé donde estará, pero no puedo evitar pensar que voy a ir a su casa. Y que nos vamos a abrazar. Y que después nos vamos a pelear. Y que después nos vamos a volver a abrazar. Y nuevamente nos vamos a pelear. Y nuevamente voy a escribir acá, hablando lo desafortunado que soy con las personas que eligo.
Chau. Feliz no Domingo/comienzo de Lunes para los que no me leen y los que jamás me van a leer.